#JUSTICIAPORIKI // Presentación de la Comisión de investigación sobre la violencia en el territorio
PARTICIPAN:
Alejandro
Bercovich, Leonardo Grosso, Rafael Klejzer, Jose Schulman, Horacio González,
Mario Santucho, Juan Grabois, Miguel Funes,Marcelo Parrilli, Victoria Donda, Pastor
Pentecostal Diego Mendieta, Padre Paco “Francisco Olveira Fuster” cura de
Opción por los Pobres, Lito Borello, Jorge Rivas, La Garganta Poderosa,
Confluencia La dignidad-Katari-OPSA, Madres de Plaza de Mayo – Linea Fundadora,
Liga Argentina por los Derechos del Hombre, Patria Grande, Movimiento de
Trabajadores Excluidos, Izquierda Latinoamericana, Organización Política y
Social Los Pibes, Movimiento Evita, La Cámpora Matanza, Frente Popular Dario
Santillán - CN, Comisión Política de la Iglesia Dimensión de Fe, Parroquia Ntra
Sra de Fátima Isla Maciel
Contacto
de Prensa: 1131476180 (Franco)
***
Documento de
convocatoria
(la convocatoria
y participación de la Comisión Investigadora de la Violencia en los
Territorios continua abierta)
El arribo al gobierno de la derecha
empresarial en Argentina supone un severo desafío para las organizaciones
populares, y para el todas las experiencias comprometidas con la
democratización social. Rápidamente ha comenzado la desarticulación del sistema
de mediaciones y garantías institucionales heredados de las gestiones
anteriores, que proveían un cobijo precario (pero cobijo al fin) a la
multiplicidad de agrupamientos que constituyen el campo popular. En paralelo,
las dinámicas de acumulación rentística que penetran los territorios e imponen
nuevas cotas de violencia social, desarticulando los lazos comunitarios y la
vida pública, van a profundizar su despliegue. En este contexto la represión y
la coacción ya están incrementándose, pero opera según nuevas modalidades,
tanto estatales como paraestatales.
La Comisión Investigadora de la Violencia en
los Territorios se propone desentrañar las tramas y los actores que se
articulan en función de estos negocios, incluyendo la participación y la
complicidad policial, judicial y del poder ejecutivo, para contribuir con
información valiosa a las causas judiciales que se libren. Al mismo tiempo, nos
interesa promover la denuncia y el debate público. En este sentido, la Comisión
Investigadora se constituye como un órgano colectivo, amplio y heterogéneo, con
la clara intención de afirmar una perspectiva radicalmente democrática de la
justicia social y los derechos humanos. El caso concreto que motiva su creación
es el intento de asesinato de Darío Julián, militante del Movimiento Popular la
Dignidad. Pero su aspiración es involucrarse en todos aquellos casos que
podamos asumir, de acuerdo a la potencia que alcancemos. Para tal fin, la
Comisión Investigadora invita a organismos de DDHH, organizaciones populares,
colectivos de investigación, medios de comunicación, instituciones y personas
interesadas en general, a brindar su aporte.
EL CASO
Sucedió el viernes 12 de febrero, a las nueve
de la noche, mientras se desarrollaba una asamblea vecinal en la plaza del
barrio. Un aspirante a sicario irrumpió a los gritos y dirigiéndose a Iki y a
su compañera Ivana, les espetó: "dejense de joder con la Sociedad de
Fomento y el tema de las tierras". Acto seguido disparó en el pecho de Iki
a una distancia de treinta metros. Tiró a matar.
Iki es Darío Julián, nacido y criado en Villa
Celina, Municipio La Matanza. El playón donde tuvo lugar el intento de
asesinato es uno de los sitios más concurridos del barrio Vicente López y
Planes. Queda sobre la calle Avelino Díaz, a pocas cuadras de la General Paz y
Avenida Roca, muy cerca del Autódromo Oscar Alfredo Gálvez.
La crónica no se agota en el hecho policial.
No fue un hecho de inseguridad. Se trata de una muestra (una más) de los grados
de violencia que está adoptando la ocupación territorial del conurbano por
parte de un entramado de negocios con articulaciones políticas y complicidad
institucional.
MOTIVACIONES
La víctima del embate es miembro del
Movimiento Popular La Dignidad. La asamblea donde recibió el balazo fue
convocada para compartir asuntos relacionados con el Jardín de Infantes que el
Movimiento va a inaugurar en el mes de Marzo. El motivo del ataque es un
conflicto que se remonta por lo menos al 2010, en torno a un predio de 18
hectáreas que linda con el barrio y aún no ha sido urbanizado.
Allí tiene su sede la Sociedad de Fomento
“Barrio Parque Modelo Presidente Vicente López y Planes”, histórica institución
vecinal que desde 2012 está en manos de una banda punteril y mafiosa. Ellos son
los responsables del intento de homicidio. Desde el MP La Dignidad señalan a
Marcelo Rostán (vicepresidente), Pedro Carlos Alberto Villarreal (Secretario
General) y Georgina Laurenziello. También al Secretario de Actas Eduardo Daniel
Ysnardes, quien habría traído a “Jony” para ocuparse de la seguridad. Jony,
autor material del disparo, se radicó hace dos meses en Villa Celina,
procedente de La Tablada.
El primer desafío de la investigación que nos
proponemos consiste en desarticular este siniestro entramado de poder local y
dejar a la luz la connivencia estatal y las responsabilidades políticas que
garantizan estos negociados. Para ello es preciso comprender las articulaciones
con que cuenta.
GEOPOLÍTICA
En el origen está la pretención urbanizadora
de las dictaduras que supimos conseguir durante el siglo XX. En 1956, con la
Revolución Libertadora en el poder, se creó la Comisión Nacional de Vivienda
(CNV), responsable del primer censo de villas miseria en la Capital y el Gran
Buenos Aires. En conjunto con el Banco Hipotecario se construyeron varios
repartos de casitas de bajo costo, para relocalizar a los habitantes de las
villas. “Plan de Acción Inmediata” fue el nombre bélico de aquel primer
proyecto para la “erradicación” de villas. Como parte de esta impronta se inaugura
a fines de los sesenta, durante el mandaro de Lanusse, el barrio Vicento López
y Planes. El Pte. Sarmiento, barrio contiguo, tiene idéntica génesis. Luego se
construyeron otros asentamientos en Villa Celina: Las Achiras, 17 de Noviembre,
San Vicente, etc. Diferentes Cooperativas de Vivienda tomaron a su cargo estos
más recientes impulsos habilitacionales.
El predio de 18 hectáreas ubicado entre las
calles Ramón Carrillo, Alfonsina Storni, Avelino Díaz y General Paz es el
último terreno disponible en la zona. Sobre Carrillo, linda con FEMSA (empresa
embotelladora trasnacional, a cargo de los productos de Coca-Cola y accionista
importante de Heineken), que a su vez limita con el Riachuelo, a la altura de
La Salada. Un lugar estratégico para el negocio inmobiliario. En algún momento,
la posesión del predio pasó de manos del Banco Hipotecario al Organismo Nacional
de Administración de Bienes del Estado (ONABE). Y luego fue cedido al Instituto
de la Vivienda de la Ciudad (IVC).
EL OVILLO
En el IVC macrista hay que ubicar el origen
de este ovillo. Desde allí sale en el año 2010 el impulso urbanizador, durante
la gestión como presidente de Omar Abud, y de Daniel Garbelini como gerente
general. Luego, sus sucesores Emilio Basavilbaso (Licenciado en Economía
Empresarial por la Di Tella) e Ivan Kerr (Master en Derecho Empresarial por la
Universidad Austral) ajustaron la iniciativa. El instrumento utilizado por
estos gerentes-militantes es la Cooperativa de Vivienda Lozana LTDA, cuyo
presidente Rubén Francisco Arias y su socio Francisco Bogado, se aliaron a los
actuales directivos de la Sociedad de Fomento antes mencionada, para concretar
el emprendimiento. Ellos fueron también los encargados, según versiones que han
comenzado a manifestarse, de pre-lotear y vender con anticipación, las
viviendas que se construirían en la futura edificación. Muchos de los
compradores son propietarios de talleres textiles, principal actividad
económica de la zona.
Un dato a tener en cuenta es la pertenencia
justicialista de los integrantes de la Comisión Directiva de la Sociedad de
Fomento. Lo cual no impide vínculos estrechos con un personaje como Miguel
Saredi, surgido de las filas del magmático justicialismo matancero, quien hizo
escala en el Frente Renovador, para luego recalar en el PRO como candidato a
Intendente perdedor en las últimas elecciones. Recientemente fue nombrado como
Director de la Autoridad de la Cuenca Matanza-Riachuelo (Acumar), y podría ser
uno de los actores protagónicos del emprendimiento comercial en danza.
Los consensos transversales que tanto anhelan
pero nunca concretan los partidos y candidatos cuando de políticas públicas se
trata, sí se verifican cuando lo que está en juego son los negocios. Allí se
cuece el neoliberalismo por abajo, responsable del aumento tangencial de la
violencia en los territorios.
EL CONFLICTO
Durante los últimos cinco años Lozana LTDA avanzó
furtivamente en el desmonte y preparación del terreno. La estrategia para no
alertar a los vecinos de Vicente López fue dejar la vegetación exterior del
predio. La estrategia del caracol invertida.
Al principio, sin embargo, el entonces
presidente de la Sociedad de Fomento, de apellido Greco, se opuso. No era la
primera vez que se intentaba lucrar con el preciado territorio. Muchos
pobladores siguen exigiendo la construcción de un Polideportivo, con áreas
verdes y espacios públicos, antiguo proyecto que nunca se ejecutó. Por eso, en
el año 2012 los actuales directivos de la Sociedad Fomento desplazaron a Greco,
garantizando así la complicidad con el negocio. Desde entonces, la SF vivió un
proceso de privatización ostensible, con enrrejado perimetral y realización de
eventos privados los fines de semana. Y es vox populi el lugar que ocupa la
otrora insitucional vecinal en el flujo de drogas de la zona.
El conflicto sin embargo escaló cuando hace
un año el barrio comenzó a inundarse de manera inédita. Darío Julián y sus
compañeros de las distintas organizaciones territoriales, detectaron que el
problema radicaba en las obras de manipulación del suelo que se llevaban
adelante en el predio en disputa. Los canales que históricamente servían de
desagote estaban completamente tapados por escombros y pedrucones. La
explicitación del diferendo motivó incluso la intervención de la policía en
varias oportunidades, siempre tendiente a garantizar el desarrollo de los
negocios. Hace apenas unos meses, el propio Comisario amenazó al Darío: “cuando
cambie el gobierno te la ponemos, gordo”. Y así fue.
LA VICTIMA
La bala, sin pedir permiso, entró por el
pecho. Y fue diciéndolo todo sin hablar. Perforó el hígado y el pulmón de Iki,
que no palmó de pedo. Ahora el herido se recupera en el Hospital Santojanni,
donde fue intervenido en varias oportunidades.
Iki también recibió un tiro el 20 de
diciembre de 2001, en los alrededores del Congreso Nacional. En esa oportunidad
la bala entró por la espalda. Su testimonio forma parte de la causa judicial
que espera ahora los alegatos de la defensa, y tras las réplicas y dúplicas de
rigor, habrá sentencia.
Iki también fue baleado el 26 de junio de
2002, durante la misma escalada represiva en la que murieron Darío Santillán y
Maximiliano Kosteki. Ese día la bala de plomo le dió en la pierna.
Dicen sus compañeros que si un cana dispara
hacia arriba, es muy probable que la bala le caiga a Iki. Humor (para un
porvenir) negro. En el medio pasaron 13 años, en los que Iki no recibió ningún
balazo. Fin de ciclo.
A diferencia de los tiros recibidos a comienzos
de siglo, el de la semana pasada no fue un disparo policial. Fue un soldadito.
La violencia que brota de este nuevo tipo de conflicto social, que se gestó
durante el paréntesis kirchnerista, impone otra clase de coordenadas. Más
impredecible en su lógica, menos vertical en su ejecución, y mucho más letal.